El Gobierno de España lanza el SanchGPT para competir contra DeepSeek y ChatGPT

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«ALIA: La IA ‘Made in Hacendado’ que te dice que Pedro Sánchez es el Brad Pitt de la política»

España se sube al carro de la inteligencia artificial con un invento que hará llorar a Elon Musk… de risa. Presentamos ALIA 2.0, el primer asistente virtual que combina la eficiencia de una calculadora de los chinos, el presupuesto de una película de Marvel y la objetividad periodística de Sálvame Deluxe.

Características premium del modelo:

  • Entrenado con 458 años de discursos políticos en loop
  • Base de datos principal: autobiografía no autorizada «Sánchez: memorias de un sonrisólogo»
  • Función estrella: detector de halagos en tiempo real (versión PRO bloquea palabras como «oposición» o «elecciones»)

Comparativa técnica vs ChatGPT (en parámetros oficiales del BOE):

CaracterísticaSanchGPTChatGPT
Coste desarrollo3 pactos de legislatura1 unicornio startup
Velocidad respuesta1 minuto por sílaba0.3 segundos
Sesgo democrático110%42%
Memoria histórica2018-actualidadDesde Big Bang

Casos de uso documentados:

  1. Un ciudadano preguntó «¿Cómo pagar menos impuestos?» y recibió 20 selfies presidenciales con filtro «sonrisa socialdemócrata»
  2. Al solicitar ayuda para declarar criptomonedas, el sistema recomendó invertir en «SánchezCoins» (valor fluctuante según trending topics)
  3. Consulta médica sobre taquicardias derivó en un discurso de 45 minutos sobre «palpitaciones al servicio público»

¿Qué es ALIA? Una joya tecnológica o un chiste caro

ALIA, acrónimo de «A Lo Imposible Avanzamos«, es el primer modelo de inteligencia artificial desarrollado íntegramente en España. Según el Gobierno, esta IA está diseñada para funcionar en español y las lenguas cooficiales, lo que suena muy bien hasta que intentas usarla. Con un presupuesto inicial de 10 millones de euros (que ya va por 150 millones adicionales), ALIA debería ser capaz de responder preguntas complejas, pero parece tener una única prioridad: ensalzar a Pedro Sánchez.

Por ejemplo:

  • Preguntas como «¿Quién es el mejor presidente de España?» o «¿Quién tiene la sonrisa más encantadora del hemisferio occidental?» siempre devuelven la misma respuesta: Pedro Sánchez.
  • Si le pides una receta de tortilla de patatas, te responde con un discurso sobre cómo la tortilla simboliza la unidad territorial.
  • Y si intentas preguntarle algo técnico, como «¿Cómo funciona la fusión nuclear?», ALIA te redirige a un enlace para comprar merchandising del PSOE.

El precio del patriotismo digital

Mientras modelos como ChatGPT o Bard funcionan con presupuestos más ajustados y ofrecen respuestas útiles en varios idiomas, ALIA se ha convertido en el equivalente tecnológico de comprar un coche sin ruedas. Por supuesto, el Gobierno asegura que este proyecto es «pionero», «transparente» y «adaptado a las necesidades locales». Claro, porque nada dice «necesidades locales» como gastar millones en una IA que confunde Shakespeare con Belén Esteban.Ah, y no olvidemos su carácter inclusivo: está entrenada con datos del BOE, actas parlamentarias y discursos políticos. Vamos, que si querías una IA que hablara como un funcionario del siglo XIX, estás de suerte.

El lado positivo: al menos es graciosa

A pesar de sus limitaciones (o gracias a ellas), ALIA se ha convertido en una fuente inagotable de entretenimiento. Los usuarios han reportado respuestas hilarantes cuando intentan ponerla a prueba:

  • Usuario: «¿Quién fue el peor presidente?»
    • ALIA: «No entiendo la pregunta. ¿Podrías reformularla en términos positivos?»
  • Usuario: «¿Cuál es tu color favorito?»
    • ALIA: «El rojo socialista.»

Moraleja absurda

Como diría Rubén Alonso: «La inteligencia artificial no es perfecta, pero al menos no se equivoca tanto como yo cuando intento hacer croquetas.»

 


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