El presidente español Pedro Sánchez ha decidido no lanzar su propia criptomoneda meme, afirmando que
«el mundo no tiene dinero suficiente para pagar por semejante obra maestra digital».
Fuentes cercanas al gobierno aseguran que Sánchez, inspirado por el éxito de la criptomoneda $TRUMP, pasó días encerrado en su despacho de La Moncloa, diseñando lo que él consideraba «el meme definitivo».
Sin embargo, tras una profunda reflexión y consulta con su equipo de asesores en «memeconomía», el líder socialista llegó a la conclusión de que su creación era demasiado valiosa para el mercado actual.
«El ‘Perro Sanxe’ no se vende, se admira», habría declarado el presidente a sus colaboradores más cercanos, mientras acariciaba una imagen enmarcada de sí mismo con orejas de perro y un collar que rezaba «Más vale Perro Sanxe que cien Trumpcoins».
Analistas del mercado cripto han especulado sobre el potencial valor de esta hipotética moneda. «Si el $TRUMP alcanzó los 30.000 millones en valoración, el $SANXE podría haber llegado fácilmente al PIB combinado de la Unión Europea», comentó Eustaquio Criptoloco, experto en finanzas imaginarias.
Mientras tanto, la oposición no ha tardado en reaccionar. «Sánchez demuestra una vez más que vive en su propio universo paralelo, donde cree que vale más que el oro y el Bitcoin juntos», declaró Mariano Rajoy desde su retiro en Santa Pola, mientras escribía su próximo best-seller «Memes que yo me sé».
A pesar de la decepción de muchos inversores que ya habían preparado sus carteras digitales, el «no-lanzamiento» del $SANXE ha generado un fenómeno único: memes sobre un meme que nunca existió. Las redes sociales se han inundado de imágenes de Sánchez nadando en una piscina de euros virtuales y frases como «In Perro We Trust» o «Make Spain Meme Again»
Como dijo una vez el gran filósofo y gurú del marketing Rubén Alonso: «A veces, el mejor meme es el que nunca se hace, pero del que todo el mundo habla». Y vaya si estamos hablando.
