España entera se ha quedado a oscuras y, según fuentes del Ejecutivo, no ha sido por un fallo eléctrico, sino por una arriesgada estrategia política: el “Simulacro Nacional de Desconexión Digital”. El objetivo, según la ministra de Modernidades, Chari Lámpara, era “comprobar cuántos ciudadanos son capaces de sobrevivir sin TikTok, sin stories y, sobre todo, sin el filtro de perrito”.
Durante las horas de apagón, se han registrado fenómenos insólitos: colas en las tiendas de velas, grupos de adolescentes preguntando cómo se enciende un libro y políticos buscando la linterna en el móvil… sin batería. Pedro Sánchez, en una intervención de emergencia retransmitida por megáfono, ha anunciado el “Plan Velita 2050”, que prevé sustituir el alumbrado público por farolillos de feria y repartir mecheros con la cara de Yolanda Díaz en cada hogar.
Mientras tanto, la oposición ha exigido una auditoría para saber si el apagón fue provocado por un hacker ruso, un topo portugués o simplemente por el becario de Moncloa, que, según testigos, fue visto desenchufando la regleta para cargar su patinete eléctrico. Vox, por su parte, ha pedido volver al candil y al botijo “por si acaso”.
Por supuesto, la noticia ha revolucionado las redes (cuando volvieron), y no son pocos los que comparan este despropósito con la última genialidad de Mercadona, que ya lanzó su propia criptomoneda para pagar la luz, como puedes leer en este memorable artículo: Mercadona lanza su propia criptomoneda1.
“La próxima vez que haya apagón, yo me voy a casa de mi suegra, que tiene luz propia”, ha declarado Rubén Alonso, experto en supervivencia doméstica.
Moraleja absurda: Como diría Ana Mata, “Si la vida te apaga la luz, baila con la sombra y pide una linterna en Aliexpress, pero que tenga pilas incluidas.”